[ Retro: Robi Combi ]
¿Quién no recuerda el amigable aparatito que servía (en teoría) para aniquilar los piojos mediante una amable y dulce descarga de 500 watts sobre su frágil e inerte cuerpo?
O mejor aún, ¿quién no recuerda la sensación en la cabeza, cuando el señor Robi aniquilaba un piojín, y uno sentía la "leve" descarga, al mismo tiempo que miles y miles de neuronas morían al instante en nuestro cerebero, dejándonos un poco mas estúpidos de lo que eramos?
Gracias Robi Combi, por ser el inicio de varios vicios que acabarían de a poco con mis neuronas. Salud!